Fruta famosa por su aspecto, suave y exótico. Tiene el nombre de un animal y se come con cuchara. ¿Sabes de lo que te hablo? Efectivamente, el kiwi. Es un alimento que debes incluir en tu dieta, dará un plus a tu vida diaria. Así que lee atentamente para conocerlo.
ESTACIONALIDAD
El frío es amigo de esta fruta, que podemos obtener de octubre hasta mayo. Las variedades más comunes en nuestro país son: Abott, Hayward, Monte, Greensill, Bruno y Allison. En España, el 75% de su cultivo se produce en Galicia y Asturias. En Galicia han creado un híbrido, el “kiwiño”, cuya característica principal es que carece de pelo.
CARACTERÍSTICAS NUTRICIONALES
Es muy muy alto en vitamina C, y una gran fuente de vitamina K. Esto se traduce en propiedades antioxidantes y favorecedoras para la salud cardiovascular. Además aporta gran cantidad de clorofilas, carotenos, xantofilas o luteína. Esto le confiere unas cualidades perfectas para hacer de barrera contra enfermedades como el cáncer, enfermedades cardiovasculares, obesidad… Si hablamos concretamente del cáncer, esta fruta tiene una doble función, pues protege al ADN de sufrir daños y ayuda a repararlo si llega a dañarse. Se han demostrado sus efectos, incluso, con una sola pieza al día de esta fruta.
Pero ¡OJO! Este alimento suele dar alergia, si percibimos picazón en la boca o una urticaria cercana a esta zona después de consumirlo, es mejor no volver a hacerlo y consultar con nuestro médico. Además, esta fruta contiene cristales de oxalato cálcico, algo a subrayar para las personas que suelen sufrir de litiasis renal.
TABLA DE INFORMACIÓN NUTRICIONAL
MACRONUTRIENTES
Se trata de un alimento de baja densidad calórica (52kcal/100g). Debe su energía a los hidratos de carbono en gran parte (10,6g/100g), puesto que las cantidades de proteína y lípidos son prácticamente anecdóticas. Teniendo en cuenta su densidad, tiene grana cantidad de fibra (1,9g/100g), por lo que también es perfecto para ayudarnos con la microbiota intestinal.
CURIOSIDAD
El kiwi no viene de Nueva Zelanda como se suele creer, de hecho, viene de China. Allí crecía salvajemente y se conocía como “yang-tao”(fruta del río). Su cultivo es bastante reciente, los chinos lo comenzaron hace unos 300 años. A principios del siglo pasado su semilla llegó a Nueva Zelanda, donde perfeccionaron su cultivo y consiguieron la fruta dulce y sabrosa que ahora conocemos. Rebautizaron este fruto por su parecido con un ave local, el kiwi. Y a mediados de siglo, esta fruta llegó al mercado internacional.
Ahora ya sabes que esta fruta es algo más que un regulador gastrointestinal, disfrútala de todas las formas posibles, ¡es salud en forma de postre!
Te proponemos nuestra original receta de Martini de kiwi un postre con es que dejarás boquiabierto a tus invitados a la mesa.
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Inés Pérez Gopar.
Estudiante del grado de Nutrición humana y dietética.
Referencias
- Ministerio de agricultura
- FEN (Federación Española de Nutrición)
One comment:
Interesante artículo, sobre todo por presentar la fruta como algo más que una ayuda intestinal.